Cigarrillos Electrónicos No Producen Efectos a Terceros

Según una investigación que se realizó en Francia, la vida media del vapor generado por un cigarrillo electrónico es aproximadamente de 11 segundos y no presentan un riesgo real para terceros ya que no existe vapor secundario. Esto resuelve en contra del argumento de varias personas que justificaban restringir o prohibir el uso de cigarrillos electrónicos porque se puede ver el vapor y, por ende, podía presentar algún daño a terceros.

Para ponerlo en perspectiva, el humo de un cigarrillo convencional de tabaco dura entre 19 a 20 minutos (1,140 a 1,200 segundos - dos órdenes de magnitud de diferencia) para dispersarse en el ambiente. En esencia, el vapor del cigarro electrónico se vaporiza en el ambiente tan rápido, que no presenta un riesgo a un tercero de accidentalmente aspirar algo. Además, las partículas emitidas en el vapor del cigarro electrónico son considerablemente más grandes que las partículas emitidas por cigarros de tabaco y pipas de agua, lo cual puede indicar que viajan a menor distancia y son filtrados más eficientemente por el sistema respiratorio (por ejemplo, por los vellos de la nariz). 

Esto no sólo ayuda a aclarar dudas sobre el comportamiento del vapor del cigarrillo electrónico, sino también ayuda a desmitificar que existe un riesgo a terceros por un "vapeo pasivo" o por el simple hecho de estar expuesto al vapor.